Hace muchos años, no recuerdo bien, quizá fue entre 1990 y 1993, sucedió algo muy gracioso que siempre estará en mis recuerdos de la infancia…
Yo tenía unos 14 o 16 años de edad, y mi hermana con su actual pareja Pedro me invitaron al circo; no recuerdo qué circo era, pero era algo chico, muy lejos de esos circos grandes que recorren varios países. En mis vagos recuerdos alcanzo a ver que la carpa estaba casi llena, un espectáculo gracioso, con payasos, animales, malabaristas, etc.
En esos tiempos, en mi país Chile estaba muy de moda el equipo Colo Colo, al cual siempre hemos odiado en mi familia; este equipo de fútbol venía haciendo las cosas muy bien, al punto de haber obtenido la Copa Libertadores de América, lo que ha sido el logro más importante de un equipo de fútbol chileno.
El asunto es que en ese circo, tomando los números de los tickets de entrada hicieron una pequeña rifa, un sorteo, regalando algunas cosas pequeñas, entre las cuales había un póster grande de este “equipo sensación” del momento en Chile, el Colo Colo.
Cuando llegó el momento de decir el número ganador del póster de este equipo, sucedió lo inesperado, el número ganador fue el de Pedro, el que afortunadamente seguía nuestros mismos colores, vale decir, los de la Universidad de Chile, que es el archi rival de Colo Colo.
Cuando Pedro fue a la pista a recibir su premio, a la vista de todo el público, apenas se lo entregan, él lo toma con sus dos manos y lo rompe en 4 partes y tirándolo al piso ahí mismo, en medio de la pista, para luego regresar a su lugar, generando con ello una verdadera ola de aplausos, abucheos, risas, gritos, etc…
Fue la verdad muy gracioso, algo que siempre recordaré.